No hay más respuesta que: Just Like Heaven, o Como si fuera cierto, u, Ojalá fuera cierto (2005) con Reese Witherspoon y Mark Ruffalo. Y es amor puro esta película. O bueno, adaptación de la novela de Marc Levy. La encontré por casualidad y cuando se terminó, la volví a ver y al día siguiente otra vez. Y aunque he intentado un par de veces iniciar la lectura del libro, me da un poco de pendiente, que resulte ser uno de esos casos en los que la película, es mejor que el libro. Así que por ahora, paso con la novela.

2.-EL DERECHO A SALTARSE PÁGINAS

3.-EL DERECHO A NO TERMINAR UN LIBRO

     Creo que puedo decir con toda la seguridad del mundo, que esta novela es el gran trauma de mi vida lectora. Llevo poco más de cuatro años con este monstruo de libro en mi lista de "por leer", pero nada más no he encontrado el momento para hacerlo, según yo, lo terminaría de leer antes de que se estrenara la más reciente adaptación y pues aja, no sucedió. Pero no pierdo la esperanza de en este año, dar por finalizada esta lectura. 

4.-EL DERECHO A RELEER

A pesar de que no me guste mucho esto de releer, tengo que admitir que Harry Potter y el prisionero de Azkaban se lleva el titulo al más releído. Es mi favorito de toda la saga, y como dato adicional, también su adaptación es mi favorita.      

5.-EL DERECHO A LEER CUALQUIER COSA

Con estos libros sí que tengo mi historia. Y aunque ahora ya no sean de mi agrado, hace muchos años ¡vaya qué lo eran! Creía que eran los mejores libros que había en el mundo y de verdad, tenía una ligera obsesión con Christian Grey. 

Pero todo terminó por esfumarse y ahora, aunque les tengo una especie de cariño, ya no me gustan taaaaaanto. Pero estoy segura que si los volviera a leer, me volverían a enganchar. Es que tienen un no sé qué, que lo empiezas hojeando y te sigues de largo con todos.

6.- EL DERECHO AL BOVARISMO

En esta pregunta iba a elegir Harry Potter, peeero la verdad, es que sí es mi saga favorita, pero lo leí ya muy tarde en mi juventud, que todavía estoy joven, pero no fue en mi niñez ni adolescencia. 

Entonces, por los únicos libros que sí he fangirleado por todos lados, son precisamente los de la pregunta anterior: Cincuenta sombras.

Si ustedes vieran mi facebook en aquellos años, era casi en su totalidad dedicado a hablar y compartir fotos, noticias y alabando a más no poder a la autora. 

7.-EL DERECHO A LEER EN CUALQUIER LUGAR

El lugar más peligroso tiene que ser mi cama, porque siempre, siempre, siempre, que estoy leyendo ahí, me empieza a dar mucho sueño, por más entretenido que esté el libro, y eventualmente termino dormida y con el libro a medio capítulo. Y aquí entra el lugar más extraño en el que me gusta leer, que es el baño. Ahí hay silencio para leer en perfecta tranquilidad. 

8.-EL DERECHO A HOJEAR

Como lo dije en una foto en instagram, este es uno de esos libros que me gusta leer capítulos al azar, frases que marqué la primera vez que lo leí. Y siempre me regresa un poco de eso que siento perdido cada vez que regresó a sus páginas.  

Sobra decir que es uno de mis libros favoritos, y siento que me eligió en un momento justo de mi vida. 

Y me encanta.

9.-EL DERECHO A LEER EN VOZ ALTA

A mis hijos, esposo, mamá, papá, hermanos y todo aquel que quiera escuchar historias tan maravillosas como las que nos regalan en este libro. 

Es una lectura imperdible, yo creo que fastidié a mucha gente, porque les recomendaba este libro, y es que de verdad, son historias que te motivan a salir y hacer todo aquello que te propongas. Son historias de mujeres extraordinarias que nada las detuvo para marcar un gran diferencia en su época y en el mundo. 

Así que sí, definitivamente tendría este libro en la mesita de noche de mis hijos.

10.-EL DERECHO A CALLARNOS

Este es mi libro favorito en todo el mundo, y fue una de las primeras "reseñas" que hice en mi canal de youtube, pero siento que para nada quedó bien.

Y es que no sé ustedes, pero me cuesta mucho hablar de aquellos libros que me gustan o que son de mis favoritos, porque siento que no puedo expresar todo lo que significan para mí.  

Aunque con El beso de la mujer araña no es que no sepa o no quiera explicar por qué me gusta, es simplemente que no sé cómo hacerlo, me faltan las palabras para hacerle justicia.

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